Descubre las úlimas novedades y actualidad de Domusa Teknik.
En el actual contexto de desarrollo de energías renovables, la bioenergía y en particular la calefacción residencial mediante biomasa es una alternativa prometedora. Sin embargo, se debe prestar especial atención al aspecto medioambiental. La combustión de biomasa (al igual que los combustibles fósiles) puede emitir a la atmosfera contaminantes gaseosos y sólidos que presentan un riesgo para la salud. Los principales contaminantes que generan un impacto negativo en la calidad de aire son los óxidos de nitrógeno (NOx) y las partículas menores a 10 micras (PM10).
El NOx es un gas que irrita las vías respiratorias a la vez que es un gas de efecto invernadero y contribuye a la acidificación cuando precipita como lluvia ácida. Las emisiones de NOx en calderas y estufas de biomasa se deben principalmente al nitrógeno que contiene el combustible y en menor medida al diseño del sistema de combustión. Entre otros, este es un motivo importante por el que se debe utilizar un combustible de calidad (por ejemplo, en el caso del pellet, la certificación EN-Plus A1 para asegurar una concentración de nitrógeno bajo).
Respecto a las emisiones de partículas, éstas se pueden emitir por una combustión incompleta (emisiones de partículas similares al hollín generado por un motor diesel), o por liberación de material inorgánico de la biomasa como sodio o potasio (emisiones de partículas de cenizas). Hay una diferencia importante entre ambos tipos de partículas. Las emisiones de partículas de una combustión completa (partículas de cenizas) presentan una toxicidad muy baja, mientras que las partículas similares al hollín que se generan en una combustión incompleta pueden tener una toxicidad significativa. Para asegurar una combustión completa es necesario obtener una elevada temperatura en la cámara de combustión y una mezcla perfecta entre el aire y el combustible.
Con el objetivo de reducir el impacto ambiental de la combustión de biomasa, la legislación europea está prestando cada vez más atención a las emisiones de diferentes tipos de sistemas de calefacción. Por ejemplo, en el ámbito de la Directiva europea de Ecodiseño (Directiva 2009/125/EC) el límite de emisión de partículas en calderas de pellet, de obligado cumplimiento a partir del 1 de enero del 2020, ha sido fijado en 40 mg/m3 (actualmente el límite es de 150 mg/m3). En cuanto a las emisiones de NOx el límite a partir del 2020 se ha fijado en 200 mg/m3 (actualmente no hay ningún límite para calderas de biomasa con potencias inferiores a 500 kW, salvo en Austria).
Además, en los últimos años se han puesto en marcha un amplio número de instrumentos legales en diferentes estados. Por ejemplo, en Alemania, desde el año 2010, el primer Reglamento federal de control de inmisiones (1. BImSCHV) sólo permite instalar calderas de pellet con unas emisiones de partículas menores a 27 mg/m3. Otro ejemplo es Francia, donde para obtener el sello de calidad Flamme Verte y poder acceder a subvenciones públicas por la instalación de una caldera de pellet, a partir del próximo 1 de enero, las emisiones de partículas deberán ser inferiores a 20 mg/m3. El país más restrictivo actualmente es Italia. Aquí han aprobado un Decreto (Decreto 186/2017) según el cual a partir del 1 de enero del 2020 sólo se podrán instalar calderas de pellet con unas emisiones de partículas por debajo de 20 mg/m3 y emisiones de NOx por debajo de 178 mg/m3.
Si bien es cierto que la combustión de biomasa produce partículas finas y óxidos de nitrógeno, la cantidad depende en gran medida de la calidad de la combustión, el combustible y la forma con la que funciona la instalación de calefacción. De hecho, la sustitución de instalaciones antiguas de leña por calderas modernas de pellet totalmente automatizadas puede contribuir a reducir drásticamente la contaminación de partículas finas y NOx.
Por nuestra parte, Domusa Teknik está comprometida en la reducción de consumo de combustible y la progresiva mejora de emisiones por debajo de los niveles más estrictos. Los últimos años estamos apostando por la investigación y desarrollo para que nuestras calderas de biomasa tengan un impacto ambiental mínimo.
Jon Makibar Gorostidi